“ Pastel de Chocolate VIII “

“Es una reunión con posibles inversores ,Martín”, le dije mientras buscaba en internet locales de ropa que pudieran vestirme para la ocasión : -“Y por qué tenés que ir vos?,¿ por qué no va el contador?”- preguntó sin dejar de observar el monitor de su computadora. -“Porque Martínez ,ya te dije, no puede ir éste sábado y me pidieron a mí !; además, creo que es una excelente oportunidad para mostrar que puedo aspirar al puesto de Martínez!”. -“…Eso es cierto…Puede que logres ese ascenso que tanto buscas!”- agregó al fin aceptando de mala gana que debía quedarse haciéndose cargo de la casa y de las nenas esa noche. Fui a varios locales de ropa hasta dar con aquel que supo coincidir no solo con mi gusto sino también con la ocasión para la que lo utilizaría, así fue que elegí un traje hecho de satén con falda apenas larga bajo las rodillas color borravino claro y una blusa ajustada blanca; zapatos de talón abierto y medias un poco más oscuras que el tono de mi piel. Apenas me lo probé supe que era lo que quería para ir a encontrarme con Sebastián :provocador ,sugerente…casi un susurro de” acá estoy al fin ,quiero lo que nos debemos “.Sin duda no era yo la que se reflejaba en el espejo de la tienda , ahí, en el reflejo, había otra Lorena : una Lorena con ganas de cosas excitantes, de probar que podía aceptar el reto de reinventarse ; no era esa mujer que supo estar enamorada y entonces solo era una esposa y una madre… Jamás me planteé lo que estaba por hacer, solo lo hice. Esa noche era mía ,me la debía , era años de soledad, noches largas esperando ser querida nuevamente ,ser deseada , la juventud latente que los años exigen moderar como al deseo y que ya no podía ocultar más ; esa noche iba a reclamarme viva nuevamente , estaba decidido. Me llegué hasta el hotel unos minutos después de lo que figuraba como horario de inicio. Fui en taxi , solo yo y mi tarjeta de invitación . Apenas entrar un botones me acompañó hasta el salón donde se hallaba la muestra fotográfica : era un salón amplio y bien iluminado en el que ya había mucha gente ; no me costó mucho desentonar entre ellos ,la mayoría eran jóvenes de la edad de Sebastián , estudiantes quizá, del ambiente artístico…no sé. El resto parecían sacados de una foto de la revista” Fortuna “: ataviados con sus mejores galas , enjoyados pomposamente ,haciendo alarde de sus refinados modales al extremo de ser grotescamente superficiales . Yo estaba tan sencillamente vestida en comparación con ellos que bien pude pasar por una entrometida ,una curiosa , o simplemente personal del hotel. Tome una copa con vino que un mozo me convidó y caminé observando las fotografías como si fueran lo más importante del mundo, como si realmente entendiera algo sobre la técnica, la luz o el mensaje subliminal que escondían ; no entendía absolutamente nada, solo esperaba ver en algún momento a Sebastián y terminar mi farsa:” Hermosa foto- dijo una mujer mayor que colgaba del brazo de un hombrecito – quedaría bien en el vestíbulo “-agregó mirándome como esperando un comentario mío; solo le sonreí y me aboqué a seguir fingiendo interés. Sebastián no llegaba y ya empezaba a pensar que quizá había sido una mala idea llegarme hasta allí ,era una total extraña en ese mundo donde todos parecían conocer de qué se trataba esa reunión y se saludaban y reían y compartían alegres comentarios mientras yo deambulaba sin rumbo de un lado a otro de la sala perdiendo tiempo… Hasta que al fin llegó : estaba espléndido con un traje entallado y esa sonrisa que me encantaba ; elegante, fresco ,un hombre nuevo cada vez. Apenas entro en el lugar todos fueron a saludarlo ,algunos se animaron a aplaudirlo y otros-los más conocidos-lo palmearon en la espalda y lo besaron afectuosamente ; pude notar que había ,efectivamente, muchos amigos de él y también amigas :todas jovencitas y esbeltas ; no puedo mentir que me sentí muy molesta al ver como lo abrazaban…pero me mordí los labios y puse mi mejor cara para seguir mirándolo .Realmente en ese momento caí en la cuenta de lo que estaba sintiendo por él ,me descubrí totalmente celosa como hacía mucho no estaba con nadie y hasta debí contenerme para no ir a reclamarlo como a algo propio ,mío , era mío por desearlo tanto ,por necesitarlo para sentirme viva ,por hacerme creer que podía rescatarme de la monotonía ,que podía reinventarme…Era mío porque estaba enamorada. Cuando pudo desprenderse de ellos se llegó hasta donde estaba yo y me saludó con un simple “hola” y un beso en la mejilla y una sonrisa que me hizo bajar la vista ; todos nos miraban pero mi mundo se reducía a él, a su perfume ,a lo que despertaba en mí tenerlo tan cerca : -Creí que no vendrías.- dijo. -Por qué no iba a hacerlo ?- pregunté mirándolo a los ojos desafiante . -Vení conmigo .- dijo tomándome de la mano y llevándome tras él . Lo seguí sin hacer preguntas .Salimos del salón y cruzamos el hall del hotel con su mano aferrando la mía ,subimos por las escaleras hasta el primer piso y nos llegamos hasta una de las habitaciones ,entonces él sacó unas llaves del bolsillo y me las dio : -Si abrís esa puerta –me dijo - ,ya no podrás volver . – y sin pensarlo siquiera : abrí.