jueves, 28 de agosto de 2014

Como las mariposas


  No quiero despertar un día y darme cuenta que pasó la vida y jamás probé tus labios, que no sentí el calor de tu abrazo ni me arriesgué a decirte mirándote a los ojos que te amo a pesar de los pesares; que aunque no podía ser, siempre fuimos. No quiero, me niego a eso, no quiero llegar a vieja siendo sabia por todas las cosas que evité para que no me lastimaran, manteniendo apariencias, negando lo que siento, eso no quiero; quiero equivocarme todo el tiempo y llorar y reír y vivir intensamente pero con vos: una noche o una vida, pero con vos. Quiero despertar abrazándote, que se me pegue tu perfume, que me inunde tu olor a piel caliente, a noche desvelada…Quiero sentirme viva nuevamente, tener el alma renacida, que me erices la piel, que la quemes, calcinar mis deseos aunque el mundo nos juzgue por infieles; lo prefiero mil veces a jamás tocarte por las consecuencias del después.
Como las mariposas, quiero que vivamos aunque sea dos días con sus noches pero intensamente y luego volvamos a morir para la gente.



No hay comentarios:

Publicar un comentario